“Guárico
pasó de ser una potencia agroindustrial a ser una potencia de sed, y es que más
de 8.000 familias en nuestra entidad viven sin agua”, alertó este martes el profesor
Rubén Jaramillo, presidente de la
Alianza del Lápiz en el estado Guárico.
El jefe
del partido de la educación en el estado sostuvo que la escasez de agua se
trata de un tema altamente preocupante que además de afectar a las familias
guariqueñas, pone a peligrar la cosecha de cultivos como tomate, cebolla,
pimentón, entre otros, correspondiente a los meses de marzo, abril, mayo y
junio. Sentenció que estos representan cerca de 30% de la producción nacional.
Desde
Valle de la Pascua, Jaramillo cuestionó que familias de las principales
ciudades del estado se vean obligados a pagar hasta 50 dólares por 3000 litros
de agua: “En la capital del estado, San Juan de los Morros, sectores como
Primero de Mayo, Camoruquito, La Morera, entre otros; les toca pagar cisternas.
Lo mismo ocurre en Altagracia de Orituco, donde los habitantes de Macaira
siguen surtiéndose de agua de los pozos que la comunidad cavó a orillas del
rio”, condenó.
El
educador además precisó que Valle de la Pascua es uno de los municipios a los
que más duro le ha tocado esta problemática. Ejemplarizó esto citando zonas
como el casco central de la ciudad llevan más de 10 años sin agua. “En este
municipio hoy más de 80% de sus habitantes no cuentan con el servicio, el
suministro de agua va desde la represa de Tamanaco hasta la planta en Valle de
la Pascua, fue instalada para atender 60 mil habitantes y hoy Valle de la
Pascua tiene más de 300.000”, agregó.
“Nos
volvieron a Guárico en un estado de camellos. Vemos como guariqueños han
perdido la vida buscando agua en lagunas, como están los vecinos reparando las
tuberías con estacas de palos. En Tucupido, en Cabruta, una población ubicada a
orillas de los ríos más importantes de Venezuela: el Orinoco, no tienen
suministro de agua por tubería”, advirtió.
Ante
este panorama, Jaramillo cuestionó que se pretenda hacer volver a maestros y
alumnos guariqueños a las aulas cuando evidentemente no están garantizadas las
medidas de bioseguridad primordiales por la falta absoluta de este servicio
público. Señaló que el liceo José Gil Fortuol, centro educativo más grande de
Valle de la Pascua, suma más de dos años sin agua. “¿Cómo cumplen el protocolo
de seguridad contra el COVID-19 los jóvenes y maestros cuando ni para el lavado
de las manos hay agua en el Guárico?”, se preguntó.
Antes de
finalizar, señaló que esta crisis afecta a los guariqueños que a duras penas
cubren las necesidades domésticas. Según dijo, “se obliga a las familias a un
gran sacrificio, si compran agua dejan de comer”.
#9Mar| Rubén Jaramillo, presidente de la Alianza del Lápiz Guárico, alertó qué “Guárico pasó de ser una potencia agroindustrial a ser una potencia de sed, y es que más de 8.000 familias en nuestra entidad viven sin agua”. @Alianzalapizgua#Guarico #ValledelaPascua #Noticias pic.twitter.com/znpSFiFFNh
— NTGuárico (@NTGuarico) March 9, 2021